Hay distintas maneras de controlar los malos comportamientos de las niñas y niños. Sin embargo, partamos de una base y es que el maltrato no debe ser una de esas maneras.
Ahora entendiendo eso, la pataleta de una niña o niño se debe manejar de acuerdo a su edad y a la etapa de desarrollo de su vida.
Nunca será lo mismo manejar una pataleta de un niño de 2 años al de un niño de 7 años. Sus objetivos y causas son muy distintos y por lo tanto deben entender muy bien ambos puntos antes de actuar. Les compartimos algunas estrategias que pueden servirles para que controlen estos malos comportamientos de una manera asertiva.
- Mantengan la calma. Sí, es más fácil decirlo que hacerlo. Sin embargo, piensen que en algunos casos los objetivos inconscientes de los niños son sacarlos de quicio. Si esto sucede, estarían logrando este objetivo negativo. Así que respiren, cuenten hasta 10, y piensen en las alegrías que el niño les ha regalado y cuando estén en calma, tomen una acción.
- Dejen que el niño o la niña se desahogue. Si, a veces pasamos el ridículo en público, pero el gritarle o regañarle solo harán que esta conducta crezca cada vez más. Dejen que se desahogue, que exprese sus emociones. Ayúdenle en ese proceso.
- No cedan a su petición. Ahora, el escuchar no significa ceder a todo lo que los niños quieren. Tienen que de una manera comprensiva pero firme hablar con los niños y hacerles entender que no es la manera de pedir las cosas. De igual manera, si piden algo que no es coherente, intenten hacérselo saber con ejemplos e historias que vayan acorde a su edad.
- Hablen con tranquilidad. Está muy ligado al primer punto, pero tienen que hablarle con calma. Tienen que transmitir paz y sabiduría con su tono de voz.
- Recuérdenle que lo aman. Nunca olviden que decir “NO” también es un gesto de amor. Aunque les duelan las lágrimas de los niños, es importante que sepas que el negarle ciertas cosas los preparan para asumir asertivamente las frustraciones de la vida. Los están preparando para los retos que tiene la vida adulta, así que no tengan miedo en hacer lo correcto.
Recuerden; Las pataletas son normales en la infancia y adolescencia. Ustedes como padres tienen que ser capaces de entender esto y de manejar la situación sin perder la calma.